El propósito de estos estudios bíblicos es llevar al creyente a la madurez, y eso se logra con el verdadero conocimiento de las verdades reveladas en la escritura. En este estudio usted aprenderá que hace parte de un reino que esta presente y activo en este momento en la tierra.
Base Bíblica: Pues si por la trasgresión de uno solo, reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia. Romanos 5:17.
BASE DE LA AUTORIDAD PARA REINAR: La obra de Jesucristo.
Cuando Adán pecó, por su desobediencia entró la muerte en el mundo y reinó sobre todo el género humano hasta la venida de Jesucristo, quien con su muerte en la cruz quitó al diablo el imperio de la muerte, por el cual mantenía al hombre sujeto a servidumbre en temor. Esto lo podemos ver en Hebreos 2:14. Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, Él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo.
Aquí la palabra destruir no significa que el diablo o Satanás ya este destruido y a la fecha no exista, como enseñan algunas sectas en la actualidad. Aquí destruir viene de una palabra griega Katargeo que significa reducir a la impotencia, anular su poder.
Continuando con el estudio bíblico podemos extraer de la escritura lo siguiente: Que así como por la trasgresión de Adán reinó la muerte, ahora por la obra de Jesucristo, todo aquel que cree en la muerte vicaria (sustitutiva) de Jesús es llamado a reinar en vida.
En la cruz Jesucristo derrotó a los principados y a las potestades, por esto el declaró que toda potestad le había sido dada en el cielo y en la tierra. Mateo 28:18. Y Jesús vino y les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
REQUISITOS PARA REINAR: Gracia y justicia.
Mientras una persona no tiene conocimiento de la forma en que Dios actúa con el hombre por medio de Jesucristo, no podrá reinar en vida, pues tratará de ganarse lo que Dios ya nos ha regalado. El pasaje de Romanos 5:17 nos da luz de los prerrequisitos para reinar en Vida. Vemos el Primero:
RECIBIR LA ABUNDANCIA DE LA GRACIA. Romanos 5:17.
La gracia es el medio por el cual recibimos de Dios lo que no merecemos y que a parte de la gracia no podríamos alcanzar.
La gracia proviene de Dios, el la ha dado a la humanidad en forma abundante, y por medio de ella otorga entrada a su reino a todo aquel que la recibe exclusivamente por la fe. Efesios 2:8-9. Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros; pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Es claro que el Hombre no puede dar gracia por que es un don que proviene de Dios mismo y el cual se recibe únicamente por medio de la fe. Dios en su sabiduría eterna lo dispuso así para evitar que la persona que recibe esa gracia se glorié a si misma; es por eso que el religioso cree alcanzar el favor de Dios (gracia) por sus meritos y por eso las personas religiosas se glorian por sus supuestos logros en la vida cristiana.
Ahora bien por esa misma fe cuando creemos somos sellados con el Espíritu Santo como pertenencia del reino de Dios, y este poder nos capacita para reinar en vida. En el cual también confiasteis vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación; en quien también, desde que creísteis, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa.
El otro aspecto mencionado en el texto base es:
RECIBIR EL DON DE LA JUSTICIA. Romanos 5:17.
La confusión de algunos creyentes es el pensar que la justicia que los capacita para estar en el reino de Dios es la justicia de sus obras, por esto no pueden reinar, porque nuestras obras son imperfectas; por esto Dios nos ha regalado la justicia de Jesucristo; la justificación no es una recompensa de Dios para el hombre, es un don, un regalo que recibimos por la fe. Es por eso que el religioso busca recompensas por sus supuestos “actos santos” que muy posiblemente lo que quieren es agradar a los hombres mas no ha Dios. Recuerde que la escritura dicta que sin fe es imposible agradar a Dios.
Si creemos que en Adán fuimos destituidos de Dios, podemos creer que en Jesucristo somos justificados por la fe, porque si fuera por la obras ya no sería por la fe. Romanos 11:6.
Solo quien ha recibido la gracia y la justicia puede reinar, en este punto debemos tener claro que no basta con tener conocimiento de la gracia y la justificación, es necesario recibirlas y vivir en ellas.
CUANDO SE GOBIERNA: En vida.
Algunos creyentes esperan reinar hasta después de la muerte o en la segunda venida de Jesucristo, pero la Escritura declara que somos llamados a reinar en vida. Todo aquel que recibe la vida e Dios (Zoe) es llamado a vivir una vida superior. Lo cree?
Jesus dijo que el Reino de Dios estaba ya presente y activo en poder en la tierra: Mateo 12:28 Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, entonces el reino de Dios ha llegado a vosotros.
AREAS DE GOBIERNO.
Sobre el mundo espiritual,- Porque ya Jesucristo derrotó el reino de las tinieblas y ahora este reino se encuentra bajo la autoridad de la Iglesia. Efesios 1:19-23. y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fortaleza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos, y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y potestad y potencia y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este mundo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquél que todo lo llena en todo.
Sobre el mundo físico, porque ya morimos juntamente con Cristo. Romanos 6:7-8. Porque el que ha muerto, libre es del pecado. Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con Él.
COMO SE GOBIERNA: Por la fe.
Nuestra fe se manifiesta por medio de nuestras palabras, un creyente que no declara en su vida la obra de Jesucristo no puede reinar porque no sabe hacer uso de la autoridad que le ha sido regalada por Dios. Un creyente que tiene conocimiento y fe declara su poder ordenando sobre las cosas que están bajo su autoridad. Mateo 8:5-13. Y entrando Jesús en Capernaúm, vino a Él un centurión, rogándole, y diciendo: Señor, mi siervo está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado. Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré. Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; mas solamente di la palabra, y mi siervo sanará. Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo soldados bajo mi cargo; y digo a éste: Ve, y va; y a otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. Y oyéndolo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe. Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos. Mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste te sea hecho. Y su siervo fue sano en aquella misma hora.
CONCLUSIÓN: Mientras el creyente no reciba la gracia y la justicia de Jesucristo por la fe, no podrá reinar en vida; mientras el creyente no aprenda a ordenar con base en el poder de la obra de Jesucristo, nada sucederá a su alrededor, porque la fe entra en acción por medio del poder de la palabra. Comience desde ahora a creer en estas verdades y salga de la religión que hasta ahora solo lo a atado a la tradición de los hombres y crea que ya esta viviendo con Cristo como: REINANDO.
Por
Mario Pombo
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