Hola Querido
Lector de Pacto Nuevo.org. Siga bendecido con toda bendición espiritual
sabiendo que en este momento usted como creyente se encuentra sentado junto con
Cristo en lugares celestiales. Hoy quiero empezar a entregar una serie de
estudios sobre la prosperidad de Dios y como las escrituras revelan claramente
que en verdad Dios quiere prospérate. Bienvenido a este apasionante estudio
bíblico confiando en que no se perderá ninguna de las entregas que se irán
dando en el tiempo. A medida que usted avance en la lectura de este estudio
verá como su mente se aclara ya que estará expuesto a la revelación de la
Palabra de Dios. Sin más preámbulos comencemos.
Cada ser humano, aún el más pobre y necesitado, ha recibido de parte de Dios un maravilloso regalo: su
cerebro. El cerebro es el más poderoso y sofisticado de los computadores que existen en este planeta, y nuestra
vida entera está regulada por la forma en que opera este órgano increíble.
Nuestros
pensamientos tienen una enorme importancia y deciden la clase de vida que
tendremos aquí en la Tierra y
también en la eternidad.
De hecho, hablando
del hombre, la Palabra de Dios asegura que COMO
ES EL PENSAMIENTO EN SU CORAZÓN, ASÍ ES ÉL (Proverbios 23:7).
Lo que pensamos
determina lo que somos.
Desde nuestro
nacimiento hemos estado alimentando nuestro computador cerebral con milIones de
ideas tomadas de nuestros padres, la familia, la escuela, los amigos, libros, radio, televisión y docenas de otras fuentes.
Estas ideas han
quedado grabadas en nuestras neuronas y se convierten en
pensamientos que determinan la forma en que vivimos y
actuamos.
Cuando nacemos de
nuevo en el Reino de Dios nuestra primera ocupación debe ser cambiar el CD, sustituir los pensamientos
viejos y erróneos que han condicionado negativamente
nuestra vida por los pensamientos frescos, dinámicos y poderosos
de la Palabra de Dios.
A este proceso la
Biblia le llama la renovación de la mente. Efesios 4:23 ordena lo siguiente:
RENOVAOS EN EL ESPIRITU DE VUESTRA
MENTE. Note bien que esto no es un consejo o una sugerencia de Pablo, sino una orden de Dios: debemos RENOVAR toda nuestra manera de pensar si queremos que el propósito
de Dios para sus hijos se cumpla en
nosotros.
Respecto a esto debemos hacer dos observaciones. La primera es que la renovación de nuestra mente es un
proceso. La salvación, el perdón de pecados, el nuevo
nacimiento son instantáneos; pero cambiar nuestro estilo de pensar demanda tiempo.
El profeta Isaías explicó hace 2.600 años cómo debe operar en nuestra vida este proceso: MANDAMIENTO TRAS MANDAMIENTO,
MANDATO SOBRE MANDATO, RENGLÓN TRAS RENGLÓN, LÍNEA SOBRE LÍNEA, UN POQUITO ALLÍ, OTRO POQUITO ALLÁ
(Isaías
28:10)
Usted debe empezar
a relacionarse con la Biblia, la palabra de Dios. Poco a poco ésta irá
introduciéndose en su mente, cambiando
sus pensamientos y renovando toda su vida.
En segundo lugar, Usted debe prepararse
para algunas sorpresas. Al estudiar los principios bíblicos se dará cuenta
de que muchos de los pensamientos que siempre le habían parecido sensatos y correctos son totalmente erróneos desde la perspectiva de
Dios.
Leamos ahora Isaías 55:8-9 PORQUE
MIS PENSAMIENTOS NO SON VUESTROS PENSAMIENTOS, NI VUESTROS CAMINOS
MIS CAMINOS, DIJO JEHOVÁ. COMO SON MÁS ALTOS LOS CIELOS QUE LA TIERRA, ASÍ SON MIS CAMINOS
MÁS ALTOS QUE VUESTROS CAMINOS Y MIS
PENSAMIENTOS MÁS ALTOS QUE VUESTROS PENSAMIENTOS.
Esto ocurre porque
la inmensa mayoría de pensamientos
que hemos ido acumulando a través de los años no provienen de Dios ni de su palabra. Poco a poco hemos
absorbido desde nuestra niñez ideas de inferioridad, de culpa,
de enfermedad, de miseria, de concupiscencia, de
amargura, de rebelión y pecado.
Gradualmente
debemos cambiar este tipo de pensamientos por aquellos principios vivos, eternos
y poderosos
contenidos en las Escrituras. El apóstol Pablo escribió: DERRIBANDO
ARGUMENTOS Y TODA ALTIVEZ QUE SE LEVANTA CONTRA EL CONOCIMIENTO DE DIOS, Y LLEVANDO
CAUTIVO TODO PENSAMIENTO A LA OBEDIENCIA A CRISTO. (2 Corintios 10:5)
Cuando Jesucristo te
redimió no estaba pensando únicamente
en trasladarte al Reino de Dios; debemos entender también que Dios tiene planes
para tu vida presente y futura dentro de ese reino. Planes de
poder y autoridad, planes de paz y prosperidad, planes
de gozo y santidad.
PORQUE YO SÉ LOS PENSAMIENTOS
QUE TENGO ACERCA DE VOSOTROS, DICE JEHOVÁ, PENSAMIENTOS DE PAZ, Y NO DE MAL (Jeremías 29:11)
Lamentablemente, estos hermosos
planes del Señor no se cumplen en la vida de muchos creyentes porque
éstos no están dispuestos a participar en el proceso de
renovación mental a que el Padre
Celestial quiere someternos.
Si Usted quiere que haya una transformación en su situación
espiritual, laboral, familiar o financiera, entonces le URGE empezar a aprender y poner en práctica los principios bíblicos
que cambiarán su manera de pensar.
Usted puede orar, ayunar y desear que haya un cambio
en su presente situación, pero este cambio NUNCA
se dará si primero Usted no cambia de manera de pensar. TRANSFORMAOS POR MEDIO DE LA RENOVACIÓN DE VUESTRO
ENTENDIMIENTO, PARA QUE COMPROBÉIS CUAL SEA LA BUENA
VOLUNTAD DE DIOS, AGRADABLE
Y PERFECTA. (Romanos
12:2)
Todas las lecciones que siguen en este
estudio tienen que ver con el plan de Dios para las finanzas de sus hijos, pero tenga presente que nuestra mente debe ser
renovada en todas la áreas si queremos tener vidas exitosas que den
fruto.
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